Morelia, Michoacán.-a 02 Junio 2021-. Hoy intenté y lo digo de corazón, dejar fuera de la columna a mi Lupe. El evento que vivirá Michoacán el domingo no es cualquier cosa y merece toda la seriedad y responsabilidad posibles. Iba a intentar, lo juro con la mano en la Constitución francesa, hablar a las claras porqué el Bizcocho va a ganar la gubernatura. No pude.
Cuando abrí la puerta de mi casa, el olor a incienso me hizo llorar. Mi Lupe estaba como poseída, alocada. Contaba y contaba las cartas de tarot. Las miradas de complicidad que echaba no podían ser para otra persona; sí, Doña Rola, su comadre que además es pitonisa, estaba bien echada en mi sillón rosado, el preferido, donde suelo llegar cada noche a intentar reconstruirme. ¡Invasora maldita!
A unos cuantos días de la jornada electoral, la Lupe no se aguantó y aunque vio el video completo de la Moni Vidente donde jura y perjura que en Michoacán va a ganar Carlos Herrera, mi ama de llaves no confía, “cuánta falta me haces Walter Mercado”, chilla la Lupe mientras se acomoda el trapo de cocina que trae atado en la cabeza a modo de turbante. ¡Dios mío, ten compasión de mi!
Y pos nada, que Doña Rola anda de mírame y no me toques; sus conclusiones con mi Lupe, dan para morir pero no de risa. Ambas locas trazaron ya el mapa electoral que regirá Michoacán después del domingo.
Como muchos analistas que dicen saber lo que dicen, mi Lupe anticipa un cierre reñido entre el Bizcocho Carlos Herrera Tello y el Juanito Bebé Ramírez, mejor dicho, entre Herrera Tello y Morena, porque al abanderado guinda nadie lo conoce, ni en su casa. Pobre Jhonny boy de tercera.
Hay quienes dicen que Morena le apuesta a la diferencia mínima para impugnar y judicializar la elección y muchos anticipan un triunfo como el de Fausto Vallejo, cuando dos días antes de que rindiera protesta, le confirmaron que había ganado.
Yo no lo creo, si bien no habrá la grandiosidad de holgura en la diferencia de votos, sí creo que será determinante y que desarmará cualquier intención de Morena. Carlos Herrera ya ganó. Lo dice el tumulto que inundó ayer el corazón de cantera, cuando Morelia vibró al compás de la democracia.
Pero además, el de Zitácuaro es, sin duda, el candidato que mejor campaña llevó en estos casi dos meses electorales. La más fresca y la más cercana. Una de colorido, de música y de jóvenes; de mujeres tocando puertas, de un candidato brincando al son de Juan Colorado y tomándose selfies sin barrera de por medio con su electorado.
Sí. Nada qué ver con el sombrío y gris Juanito de Morena. Un pobre Alfredo rebasado, ignorado hasta por sus propias huestes. Hasta el último día, Morón demostró quién es el jefe en ese partido político que en Michoacán, no tiene cabida.
Mi Lupe y Doña Rola pusieron al osito bonito del Verde, don magistrado Juan Antonio Magaña de la Mora, en el tercer lugar. Sí, la gente aprecia a los candidatos preparados y se notó. El exprocurador logró lo impensable y el verde se sacó un diez con la elección de candidato y, a pesar de su pobre equipo que le acompañó, Magaña de la Mora desbancó al que siempre se pensó en el tercer lugar: don Cristóbal Arias, el viejo político que, en esta elección, pareciera que dio sus últimos garrazos mortales. Y se fue al cuarto, desgastado y con una realidad muy triste. Bien por Fuerza por México que le aguantó los desaires. Lo mejor de don CAS, el trabajo impecable de Arturo Herrera Cornejo.
Doña Rola regresó a Hipólito Mora a jefe de tenencia de La Ruana, dice que allá sí gana la jefatura. Aquí, no; y de la Meche Calderón, pos ni pa qué hablar porque luego me van a decir antifeminista y promotora del patriarcado y pos no, pero es rewey la doña.
Morelia no será sorpresa. Desde que Alfonso Martínez anunció su regreso, a pesar de su malrefriteada campaña a la que sólo le cambió la fecha, los conocedores anticiparon el triunfo del casi-yanoes independiente. Con colaboradores que juran el “ya mi vi” cobrando quincena en la comuna, el exdiputado werito no se quiere confiar, pero sí se volvió medio sangrón. Lo bueno es que le acompaña gente preciosa que sin duda, harán mucho por la zangoloteada capital michoacana, sí, esa misma que le dará el triunfo a Herrera (¿vieron su cierre de ayer?).
Y en el segundo sitio, el Grandote Memo Valencia, que bien pudiera haber sido el primero y que sin duda, le meterá un buen susto a su examigo, porque ahora, ya no se quieren pero antes casi de beso se saludaban. En fin la hipotenusa. El esfuerzo de Valencia no tiene par y tiene harto camino andando, seguro que algo le redituará.
A decir verdad, ninguna campaña en Morelia le gustó a mi ama de llaves y menos a su comadre pitonisa, quienes situaron a la marca y al ridículo abanderado de Morena, Iván no-sé-qué, en tercer sitio, pegadito a Marx Aguirre, la hija de Jerjes y de Clara Ochoa, la candidata que el Verde Ecologista desperdició en una alcaldía cuando hubiera hecho un mejor papel en la disputa de una diputación. Pero es joven, tiene tiempo y le abonará buenos votos al registro del PVEM.
De Vanina Hernández Villegas, ni qué decir, poco le valió la cercanía y el apoyo del exgobernador Víctor Tinoco, La chamaca es inteligente, pero más parece niña genio que candidata a nada. Sorrynotsorry. Y del profe Miguel García Meza, de RSP, pos mejor me sigo de largo, ya pa qué decir nada.
Y hablando del PVEM, Doña Rola dice que sí se queda con un puño de alcaldías: Sixto verduzco, Tiquicheo, Angangueo, Peribán, Aquila, Coahuayana, Jiquilpan, Ario de Rosales, Santa Clara del Cobre (con Melitón Naranjo, muy buen candidato); Ocampo, Tocumbo, Jacona (matata), Villamar, Chilchota y que tiene buenas probabilidades Maravatío, Ciudad Hidalgo. Y que respiren tranquilos porque se quedan con su registro.
Nos toca a los ciudadanos matar de un fregadazo el riesgo de la judicialización de la elección y de comicios extraordinarios, Michoacán no se lo merece. Es claro que Morena no pega su chicle en nuestro estado, pero también es claro que van a dar la lata así que, como los de Redes Sociales Progresistas, hay que dar el voto a la mejor propuesta y esa no es de color guinda.