Morelia, Michoacán, 20 de junio de 2023.- A un año del asesinato de dos sacerdotes jesuitas en Chihuahua, la Arquidiócesis de Morelia, se unió con el repique de las campanas de la Catedral de la capital michoacana como signo de exhorto a la paz en el país.
Rubén Pérez, Vicario Diocesano de Pastoral de la Arquidiócesis, en entrevista telefónica detalló, la comunidad católica hace un llamado a la paz en el país.
“Este momento tan importante es a un año, de la muerte de los sacerdotes que fueron asesinados en Chihuahua y también como las catequistas de León que también fueron asesinadas y también a todas la personas que han sido víctimas de violencia o que han perdido la vida”, detalló el sacerdote.
A propósito de las familias desplazadas en la Tierra Caliente de Michoacán, Rubén Pérez, mencionó que es momento de voltear a verlos para que regrese la paz a sus lugares de origen.
“Es un llamado urgente a que todos construyamos la paz y en caso concreto es un llamado a que volteen a ver a los que están sufriendo este desplazamiento forzado, a los sacerdotes que han sido violentados como el padre Javier".
Ciudadanos morelianos se dicen a favor de este tipo de actos, con el propósito de pacificar, pues aseguran, el estado y el país lo necesitan.
“estoy a favor ya que desafortunadamente estamos en unos tiempos muy críticos, donde ya no hay un respeto. Sí es como de pensarse, porque ya no puedes estar ni en los lugares públicos”, mencionó Mireya Rángel
“Está muy delicada la situación, es muy feo lo que le está pasando a las personas que viven en esa región, ya es hora de que por favor se haga algo”, detalló Alfredo Pérez.
Carlos Garfias Merlos, arzobispo de Morelia, a través de un mensaje difundido en las redes sociales de la Iglesia en Michoacán, invitó a los feligreses a unirse en oración para transformar la inseguridad.
“El Papa Francisco nos invita a que vayamos transformando la violencia y la inseguridad en expresiones de paz y de compromiso para generar confianza y ayudar a nuestros hermanos”, comentó Carlos Garfias.
Las campanas de la Catedral moreliana repicaron a las 3 de la tarde simultáneamente en todo el país, durante un minuto.